Y
mi vientre se contrae de emoción,
El
reloj como ladrón en la noche
Anuncia un tiempo recorrido;
Tengo
prisa.
Urgencia
de perderme en tu risa,
De
retener el roce que desfallece mi sentir,
Coquetear con tu piel húmeda y
Contemplar
que aún mozo mi otoño es;
Tengo
prisa.
Escapar
de mí y saborear lo desconocido,
Es
Impaciencia de existir y atinar,
De
vagar en ti aún llegado el alba,
Avivar
el fuego del placer;
Tengo
prisa.
Degustar
un sinfín de sabores,
Dominar
lo censurado,
Bailotear
“corrientes 348 a media luz”
Y
conocer los límites del libertinaje;
Tengo
prisa.
Despojar
mi razón de la insensibilidad,
Cantar
este júbilo con notas claras
Y
soltar la blancura de esta melena
Con
paso firme y ameno.
Tengo
prisa
Por Mónica
Lowenberg. Mayo 2014